Oculta, la palabra

Teñidas las dulces alas de azul añil, para hacernos creer que todo era real, que aquellos altibajos no eran nada, que solo imaginabamos que aquella palabra que siempre empapaba tus labios y tu voz nunca iria por ti, pero no es así.

Estrella tu rabia contra la pared porque nunca supistes preguntar. El rechazo y la espalda es lo único que conocio tu fuerza, aquella que escapaba cuando no mirabamos, sin pensar, sin expresar. Si alguna vez te molestó porque no tubistes el valor de gritar y decir lo que pensabas en realidad. Te preocupas demasiado por algo que nunca tubo la importancia que le das, reconstruyelo y veras que tal vez no fuera como solias pensar.

Quitate el velo que tapaba esa mirada que siempre veia la traición. Esa sin expresión.

Deja de ocultarte, ya ves que nunca más deberías esconderte, no sirve de nada.

Siempre estamos aqui, siempre dispuestos a escuchar, y sin embargo, para ti nunca existio tal oido...

Deja de esconderte mas...déjala de esconder...